Historia

A partir de 1910, gracias a los baños que comenzaron a surgir, la restauración empezó a adquirir importancia. Los pequeños restaurantes del antiguo Paseo Nacional y del interior de la Barceloneta, estaban básicamente dedicados a los trabajadores del puerto y de las industrias, pero pronto se hicieron populares entre los barceloneses, que acudían de forma masiva todos los fines de semana.
El barrio de la Barceloneta siempre ha estado unido a las playas, al ocio, al sabor a mar y, como no, a sus famosos restaurantes, o «chiringuitos».



En la playa se instalaron numerosos merenderos que nacieron de la mano de algunos hombres de mar que ofrecían cocina de pescador con pescado fresco acabado de llegar de la playa, y que con los años sobrevivieron reconvertidos y denominados los «Chiringuitos de la Barceloneta», hasta su desaparición a finales de los años noventa…
